Un chalet en las afueras de Murcia adquirido por la M. Fundadora de las Religiosas de la Compañía de Cristo Rey para residencia de las hermanas. y noviciado. Pero éstas han de ejercer su contribución a la extensión del Reinado efectivo de Jesucristo en el mundo comenzando con una labor que se impone como acción especial propia de esta Congregación: sus internados llamados “Hogares de la Divina Providencia”, donde se dé una formación cristiana, cultural e integral a niñas, especialmente a huérfanas y otras que por diversas causas necesitan la convivencia en un internado.Unas 50 niñas eran atendidas con muy escasos medios económicos. Las Religiosas, siempre muy sacrificadas, con mucho amor y alegría, procuraban por todos los medios que no sintieran carencia alguna de cuanto bueno se disfrutaba en un hogar feliz.

Comenzó a poblarse la urbanización de Santa María de Gracia, muy próxima al Centro Cristo Rey, y muchos padres pidieron con insistencia la admisión de sus hijos en el Colegio y que participaran en clase con las alumnas internas. Entre estos había Profesores de C.P. que veían con agrado al Colegio por la proximidad a sus domicilios y conociendo el estilo de enseñanza enviaron a sus hijos a compartir las clases con las internas. Conocida la Obra, muchas personas  insinuaron lo bien que vendría en este lugar un Jardín de Infancia que al ser privado colaboraría un poco al sostenimiento del internado. Se hicieron los trámites para conseguir del M.E.C. la apertura oficial y fue tan grande el éxito que los Colegios de San Buenaventura, Maristas y otros que no tenían Preescolar, se surtían con los niños de “Cristo Rey” que iban muy bien preparados para comenzar la Primaria. Así, sin pretenderlo, fue precisa la ampliación que continúa hasta el día de hoy esperando siempre una mayor y mejor continuidad. Como Centro Católico tenemos un IDEARIO fundamental que vivifica todo el quehacer educativo desarrollado en el Centro con el fin de que los profesores, padres, alumnos y personal no docente conozcan el tipo de educación que en él se imparte y que consideramos imprescindible para llevar a cabo nuestra labor de educadores.